PASIÓN POR EL VINO, SIN ARTIFICIOS.
Ramón do Casar está situado en una terraza a
los pies del embalse de Castrelo de Miño,
en Prado (Ourense).
Ante nosotros tenemos un espejo al que mirarnos
cada día, una balsa de agua que nos transmite
serenidad, y vida.
Ramón do Casar está situado en una terraza a los pies del embalse de Castrelo de Miño, en Prado (Ourense).
Ante nosotros tenemos un espejo al que mirarnos cada día, una balsa de agua que nos transmite serenidad, y vida.
PASIÓN POR EL VINO, SIN ARTIFICIOS.
Ramón do Casar está situado en una terraza a
los pies del embalse de Castrelo de Miño,
en Prado (Ourense).
Ante nosotros tenemos un espejo al que mirarnos
cada día, una balsa de agua que nos transmite
serenidad, y vida.
Ramón do Casar está situado en una terraza a los pies del embalse de Castrelo de Miño, en Prado (Ourense).
Ante nosotros tenemos un espejo al que mirarnos cada día, una balsa de agua que nos transmite serenidad, y vida.
E
Hay rincones mágicos que te
permiten desconectar y
conocerte un poco más. Para
nosotros, uno de ellos es el
viejo embarcadero de la finca
Veiga Bella. Un lugar en donde
es posible evadirse viendo
pasar el tiempo.
Hay rincones mágicos que te permiten desconectar y conocerte un poco más. Para nosotros, uno de ellos es el viejo embarcadero de la finca Veiga Bella. Un lugar en donde es posible evadirse viendo pasar el tiempo.
La biodiversidad presente
en los viñedos, nos habla
del delicado equilibrio
ecológico que podemos
encontrar en el entorno
natural de Ramón do Casar.
Hay rincones mágicos que te permiten desconectar y conocerte un poco más. Para nosotros, uno de ellos es el viejo embarcadero de la finca Veiga Bella. Un lugar en donde es posible evadirse viendo pasar el tiempo.
E
La biodiversidad presente en los viñedos, nos habla del delicado equilibrio ecológico que podemos encontrar en el entorno natural de Ramón do Casar.
La herencia de la naturaleza.
Las piedras hablan, son testigo del
paso de los siglos y de los secretos
ancestrales de la viticultura.
En Ramón do Casar creemos en esa
conexión profunda entre el hombre y
la naturaleza. Pensamos que
nuestros vinos hablan de ello.
La herencia de la naturaleza. Las piedras hablan, son testigo del paso de los siglos y de los secretos ancestrales de la viticultura.
En Ramón do Casar creemos en esa conexión profunda entre el hombre y la naturaleza. Pensamos que nuestros vinos hablan de ello.